El hotel era único y de categoría alta con un personal bastante amigable en la recepción. El desayuno era abundante y completo, tenía una buena cantidad de opciones y la comida estaba deliciosa. Me ha gustado mucho de verdad mi habitación lo suficientemente espaciosa y funcional, tenía una caja fuerte personal, una nevera y una mesa de trabajo. Las vistas a la azotea eran cautivadoras, y tenía una ubicación céntrica muy cerca de varios lugares, como lugares de interés turístico y el centro histórico. Además, estaba cerca de todo.

El barrio Jerusalén Oeste es genial, valía la pena quedarse. El hotel estaba muy cerca de la parada de autobús King George, a solo 20 minutos andando...

Sobre todo la ubicación (está al lado del mejor hotel de Jerusalén) a diez minutos andando a la ciudad vieja. Además el jardín donde puedes tomar algo o desayunar.

No me gustó por el precio, la calidad de la habitación. Las vistas eran malas y no era una habitación moderna. Pueden mejorar renovando las instalaciones especialmente de las habitaciones. Sin embargo el edificio, la piscina tiene mucho encanto y el personal fue muy amable.

La relación calidad-precio del hotel fue excelente y la habitación era muy buena. La ubicación del hotel era perfecta, cerca de la ciudad antigua y en una zona tranquila. El personal del hotel fue extremadamente amable y servicial.

La experiencia del desayuno podría haber sido mejor si hubiera habido más variedad en el menú.

Lo más destacable de este hotel es su ubicación, situado en una excelente zona de Jerusalen, y a un paso de la Ciudad Vieja y del centro de la Ciudad Nueva

El desayuno era muy poco variado y no tenía nada de bolleria.

excelente ubicación, precioso edificio, personal extremadamente atento, muy buen desayuno, muy limplio

minucias...no funcionaba el control remoto del televisor, y en la habitaciòn no había hoja informativa respecto a cómo usar el teléfono (casilla de mensajes de voz, tomar lìnea externa, etc), tuve q preguntar en la recepción donde me contestaron con claridad y amabilidad.

La habitación nueva era extremadamente agradable y el baño grande. Me proporcionaron un hervidor eléctrico y una nevera. El lugar era de primera y espectacular, cerca del centro de la ciudad, de tiendas y lugares de interés y de restaurantes y bares, y la vista era increíble.

El hotel es muy limpio. Tiene servicios muy buenos. La comida es buenísima. Ubicación cómoda y también ideal para ir a las cafeterías y los restaurantes. Las habitaciones con una cama cómoda. Los baños son excelentes. Ofrece una vista espectacular. El personal es muy atento en todo momento.

lo que mas me gustó fue la ubicación del hotel

es un hotel aceptable, no tengo quejas

en general, el lugar era único y tenía un personal atento y muy atento en la recepción. el alojamiento tenía una ubicación céntrica cerca del casco antiguo. cenamos en satya restaurant, que estaba a poca distancia andando del lugar. nos ha gustado mogollón nuestra habitación bastante agradable y de calidad excelente con un buen aire acondicionado. el desayuno era nutritivo y abundante con buena comida, la comida estaba buenísima.

Elegí el Ymca Three Arches Hotel por su excelente ubicación cerca del casco antiguo de Jerusalén, para poder visitar el Muro de las Lamentaciones. Pero me sorprendió gratamente el restaurante del hotel, donde pude disfrutar de auténticos platos locales y regionales, seleccionados de la costa mediterránea y del exótico Medio Oriente, en un ambiente elegante pero informal que me transportó a una encantadora y fascinante era. Además, el hotel cuenta con nuevos restaurantes y bares, ideales para atraer tanto a jóvenes como a personas mayores con espíritu joven, y especialmente a turistas. La animada oferta gastronómica del cercano mercado de Mahane Yehuda, convertido en una red de bares y restaurantes, creó un ambiente soleado y delicioso.

La piscina, siendo parte de las instalaciones del Ymca, no contaba con un trato especial para los huéspedes. El personal en esta área ofrecía poca información.

Este lugar está muy cerca de un museo, varios jardines y buenos vecindarios;

La filosofía imperante, que se resume en las hermosas palabras escritas a la entrada, en el respaldo del sillón, antes de las escaleras. El mirador, que es es de gran valía, una ayuda enorme para conocer y apreciar la ciudad. No es frecuente encontrar pianos y carillones, por lo cual aprecio el piano del hall en la planta baja, aunque no sé en qué estado está porque no me acerqué a él; sí en cambio traté de tocar uno vertical en una sala que se encuentra yendo a los tocadores en el subsuelo; pero no pude porque está en muy mal estado. Valoro grandemente el carillon, y que lo toquen, escucharlo es un regalo.

En mi primera estancia, el barrote de la bañera estaba desprendido, lo cual hacía imposible sostenerse de él y eso es algo importante. El uso de la PC en el hall de entrada no es muy cómodo, tuvo que intervenir el personal del hotel las dos veces que lo necesité porque no podía entrar. Es incómodo que no haya tocadores en la planta baja para cuando uno necesita estando en el hall de entrada o en el comedor. Gracias si llegan a colocar tocadores en la planta baja para evitar bajar las escaleras al subsuelo.

El ymca tiene unas cuantas cosas a favor, la ubicación en la ciudad es excelente. Estando fuera de la ciudad vieja queda a escasos diez minutos de la puerta de Jaffa. Tiene una terraza muy linda para desayunar, almorzar y cenar. La comida es buena y la atención también. Buena relación calidad precio.Muy cerca también hay una calle peatonal donde está lleno de bares y restaurantes con una animada vida nocturna.

Lo peor del ymca son las habitaciones. Tienen buen tamaño pero están un poco abandonadas si bien son limpias. El baño un poco anticuado y la ducha bastante mala.

La ubicación, y el edificio.

Las habitaciones son muy muy simples.